Este proyecto propone generar espacios resilientes dentro de los centros penitenciarios donde un equipo de capacitadores jóvenes impartan talleres que atiendan las necesidades psicoemocionales y sociales de los internos (mujeres y hombres jóvenes) que viven un proceso de pena privativa de libertad ahondando en las raíces del comportamiento delictivo. Aportando desde un enfoque integral distintos talleres con una metodología de participación basada en mediaciones a través de vehículos como el arte, la lectura y la reflexión sobre problemáticas sociales, con temas interrelacionados que les brinden herramientas para la vida dentro y fuera de prisión. Pigmalión está inspirado en el llamado “Efecto Pigmalión” que en psicología y pedagogía se refiere a la influencia que ejerce la creencia de otra persona en el potencial y rendimiento de otra, buscando que el personal involucrado sea un potenciador de las habilidades de las personas privadas de su libertad al impulsar su desarrollo personal.